Qué ver en Vilna era la pregunta que se repetía en mi cabeza mientras viajaba en tren desde la vecina ciudad de Kaunas. Después de haber visitado la encantadora Tallin en Estonia y la seductora Riga en Letonia, no sabía que esperar en Vilna, la capital de Lituania.
Vilna era mi última parada de mi viaje por los Países Bálticos y por esas cosas de la vida no sé por que reservé 4 noches en la ciudad. Lo único que tengo claro es que fue una decisión acertada, ya que pasé un fin de semana muy entretenido descubriendo una ciudad que encanta y que tiene muchas cosas para hacer.
Para que tengas una idea de lo que puedes hacer en la ciudad y no llegues a ciegas como lo hice yo, he preparado esta publicación con algunas cosas qué ver en Vilna para que prepares tu viaje.
Toma nota que empezamos ¡Bienvenido a Vilna!
Qué ver en Vilna
1. Casco Histórico de Vilna
El centro histórico de Vilna es considerado como uno de los más grandes y mejor conservados zonas medievales de Europa del Este, además fue incluido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1994.
La avenida central de la ciudad antigua incluye las calles Aušros Vartų (donde se encuentra la Puerta de la Aurora), Didžioji (junto a la Plaza del Ayuntamiento) y Pilies que finaliza junto a la plaza de la Catedral de Vilna.
Alrededor de estas calles se pueden encontrar edificios antiguos, iglesias de bonitas fachadas, tiendas, restaurantes y algunas pequeñas plazas que le dan el toque verde y natural que todo lugar necesita.
Una de las calles interesantes que podrás encontrar en pleno centro es la calle Literatai. Los muros de esta colorida calle están decorados con decenas de obras de artistas en diferentes soportes (metal, madera y vidrio).
La gran mayoría de las cosas que verás en esta publicación están ubicadas en el centro histórico de la ciudad, sin embargo hay algunas por las que tendrás que caminar un poco. No te preocupes que todo lo podrás hacer a pie.
2. Plaza del Ayuntamiento
Una bonita explanada con terrazas para comer o pasar por un café, además de edificios coloridos de tejados rojos coronan lo que es la Plaza del Ayuntamiento, el corazón de Vilna.
El antiguo edificio del ayuntamiento destaca en un extremo de la plaza y hoy sirve como centro de eventos, exposiciones y conciertos. Es un edificio sencillo y que además alberga la oficina de turismo de Vilna.
Es un lugar interesante para visitar, ya que se puede pasear por el edificio y disfrutar de las exposiciones que se realizan al interior. La entrada es gratuita.
3. Catedral de Vilna
La Catedral de Vilna es la principal iglesia católica de Vilna y una de las postales más reconocidas de la capital.
Fue construida en el lugar de un antiguo templo pagano y junto al castillo defensivo de Vilna. Ha sido reconstruida varias veces debido a incendios y guerras.
Hay unas catacumbas que se pueden visitar en la que se encuentran los restos de personajes relevantes de la historia de Lituania.
La torre del campanario y sus 57 metros de altura, complementa la postal icónica de la catedral. Está ubicada frente a la catedral y se puede visitar. La plaza de la catedral también es un lugar interesante, ya que es muy animada y siempre hay cosas para ver.
Alrededor de la catedral encontrarás otros dos edificios interesantes: el Palacio de los Grandes Duques de Lituania y el Museo Nacional de Lituania.
4. Puerta de la Aurora
Lo que en sus inicios era una de las 10 puertas defensivas de las murallas de la ciudad, hoy se ha convertido en un lugar de oración y símbolo de Vilna.
Mencionada por primera vez en 1514 toma su apariencia actual en el siglo XIX después de un proceso de reconstrucción.
La fama y símbolismo se debe en gran parte a la pintura de la Virgen María ubicada en la capilla junto a la puerta. Es una de las pinturas renacentistas más famosas de Lituania. Es venerada por fieles que vienen de todas partes a verla y adorarla. Además, dicen que es milagrosa y ha ayudado a decenas de personas.
La Puerta de la Aurora es sin duda una de las cosas que ver en Vilna.
5. Bastión de Vilna
Otro de los sitios sobrevientes de las antiguas murallas de la ciudad es el Bastión de Vilna.
El bastión fue construido en el siglo XVI como parte del sistema defensivo de la ciudad. Tiene la forma de un circulo cerrado y el día de hoy es un museo en el que se pueden encontrar exposiciones de armas del siglo XV al XIX.
Además, sirve como un gran mirador para disfrutar de hermosas vistas de la ciudad. Si no quieres entrar, pero igual quieres captar una linda panorámica, camina a la colina junto a el y obtendrás una vista similar. Esto fue lo que hice yo.
Después del bastión te sugiero que bajes la colina y pases por el mercado Tymo, el primer mercado orgánico de Vilna. Se pone los días jueves, siempre que el clima lo permita.
6. República de Uzupis
Algo parecido a lo que ocurre con Christiania en Copenhague, también se da con la República de Uzupis en Vilna.
En 1997 un grupo de residentes de Uzupis, el barrio más pequeño de la ciudad, decidieron declarar su independencia. Lo hicieron el 1° de abril (día de los inocentes) para remarcar el caracter sarcástico de esta declaración.
En la actualidad es una zona que se ha consolidado como un lugar de artistas y emprendedores.
Es un lugar muy interesante en el que encontrarás un puente que sirve como paso fronterizo (no te preocupes que no será necesario llevar el pasaporte. Cuando cruces el puente busca el columpio que hay debajo de el y la Sirena de Uzupis. Lo puedes usar pero recomiendo que lo hagas en verano.
Tras pasar el puente busca el Ángel de Uzupis y la calle Paupio donde encontrarás la Constitución de Uzupis. Está en varios idiomas, español incluido, y tiene algunos derechos muy interesantes a considerar.
El barrio no es muy grande, por lo cual es fácil de recorrer. Me gustó mucho, ya que es diferente a lo que se ve en el centro histórico. Tienen un ambiente más alternativo y relajado.
7. Colina de las Tres Cruces
Después de Uzupis, el camino sin duda te llevará a subir la Colina de las Tres Cruces.
En ella encontrarás el memorial de las Tres Cruces. La colina recibe el nombre después de que algunos monjes franciscanos murieran como martires cuando los paganos del lugar los ataran a unas cruces y los lanzaran colina abajo. Las tres cruces fueron colocadas en el lugar para conmemorar este evento.
Son tres cruces blancas que se pueden ver desde toda la ciudad. Hay un sendero bien señalizado y el esfuerzo que harás será bien recompensado con la hermosa panorámica que verás. Un paseo muy recomendado.
8. Vilna la ciudad de las iglesias
Desde tiempos remotos (siglo XVI) y debido a la gran cantidad de templos religiosos y monasterios que hay en la ciudad, Vilna ha sido conocida como «la ciudad de las iglesias«, «la Roma del norte» o «el Jerusalén de Lituania«.
En el centro histórico hay iglesias de fachadas hermosas, distintos estilos de arquitectura y decoradas con verdaderas obras de arte en el interior.
Acá te dejo una lista de las que pude visitar:
- Iglesia de Santa Catarina: iglesia católica de estilo barroco. Tiene una hermosa fachada y una pequeña plaza frente a ella.
- Iglesia de San Casimiro: iglesia católica de estilo barroco. Tiene una fachada color rosa muy atractiva. San Casimiro es el patrono y guardian de Lituania.
- Iglesia de Santa Ana y San Francisco de Asis: es un complejo religioso al que se le suma el monasterio de San Bernardino. Iglesias de culto católico de arquitectura gótica.
- Iglesia de Santa Teresa: de culto católico. Se encuentra cerca de la Puerta de la Aurora.
- Iglesia Ortodoxa rusa del Espiritu Santo: de estilo barroco, destacan los colores verdes y azulados de su decoración interior.
- Iglesia Dominicana del Espíritu Santo: de estilo barroco. El interior de la iglesia es impresionante. Es uno de los más valorados de todas las iglesias de Lituania.
Todas estas iglesias están en el centro de la ciudad y puedes visitarlas caminando.
9. Colina de Gediminas
En medio de la ciudad y junto al río Neris, se levanta esta colina de 48 metros de alto.
En este lugar el Gran Duque de Lituania Gediminas construyó un castillo de madera en el siglo XIV. De ese castillo, posteriormente construido con ladrillos, sobrevive la Torre de Gediminas, convertida hoy en todo un símbolo de Vilna.
Se puede subir caminando y en teleférico. Desde el mirador de la colina se puede ver todo el centro histórico de Vilna con sus hermosos tejados rojos, el curso del río Neris y la zona más moderna con rascacielos de vidrio.
Yo subí caminando y me quede un rato largo. La vista es hermosa. Me faltó ir al atardecer, aunque espero hacerlo en una próxima visita.
10. Avenida Gediminas
Hay muchas cosas en Vilna y en Lituania con el nombre de su gran duque. Una de ellas es la Avenida Gediminas.
Esta gran acvenida comienza justo frente a la Catedral de Vilna y se extiende hasta el río Neris.
En ella hay muchas tiendas, restaurantes, algunas iglesias y edificios gubernamentales y culturales de importancia. Entre ellos destaca la Academia Lituana de Música y Teatro, el Teatro Nacional Lituano de Drama, el Parlamento de Lituania y algunos ministerios.
Te sugiero que cuando recorras la avenida aproveches de parar en alguno de los bonitos parques que encontrarás en el camino y disfrutar su animado ambiente. De día y de noche siempre encontrarás un lugar para hacer algo.
Si tienes un poco más de tiempo visita la Colina de Tauras, conocida en tiempos pasados como la Colina del Diablo. Hay una bonita vista de la zona más moderna de la ciudad.
11. Escultura del Huevo de Pascua
Una de las curiosidades que se pueden ver en Vilna es la particular escultura del Huevo de Pascua.
En medio de una plaza en el cruce de las calles St, Stephen y Pylimo vi este gran huevo montado sobre una columna que no deja indiferente a nadie. Fue construido en 2003 y pesa cerca de 300 kg.
El huevo simboliza el renovado barrio del casco antiguo y la primavera que todos ansian cada año.
12. Pasear en globo aerostático
Una de las cosas que me llamo la atención al pasear por Vilna fue ver la gran cantidad de globos aerostáticos que volaban por sobre la ciudad.
Para cualquiera de nosotros no es bastante común, pero para la gente de esta ciudad ya no es novedad. Vilna es una de las pocas ciudades de la Unión Europea que permite volar sobre la ciudad globos de aire caliente.
Hay un gran parque desde donde salen que esta junto al rio Neris, al lado de la zona de los rascacielos. Acercate hasta el puente de Baltasis para encontrar este lugar. Está a unos 15 minutos caminando de la catedral.
Yo no me subí, solo los vi sobrevolar la ciudad. Si tienes más coraje que yo y no le temes a las alturas, no pierdas la oportunidad de disfrutar del maravilloso centro histórico de Vilna desde el aire.
13. Arte callejero
A mi me encanta el street art, el arte callejero que se puede encontrar al recorrer una ciudad. En Vilna hay bastante en una zona en particular.
El barrio de Stotis se ha revitalizado en los últimos años como área de eventos culturales, arte callejero y vida nocturna. Es la zona donde se encuentra la estación de trenes de Vilna y la estación de buses de la ciudad.
Aunque no tengas que moverte de la ciudad caminar por las calles de esta antigua zona dedicada al transporte es un paseo muy recomendable.
Si te da un poco de hambre y quieres ver productos locales, aprovecha de pasar al Hales Market, uno de los mercados más grandes y antiguos de Vilna. Su edificio data del año 1906.
14. Día de la música callejera (Street Music Day)
Al igual que en Riga, mi visita a Vilna coincidió con un gran evento. Esta vez fue el Street Music Day que hizo mi estadía en la ciudad aun más especial.
Por un día las calles de Vilna, plazas y esquinas se llenan de artistas de diferentes edades y estilos musicales para hablar con el público en el idioma universal de la música. Es una fiesta que atrae a musicos profesionales y amateurs. La única condición es que se atrevan a tocar al aire libre.
Este evento se hace todos los años en el mes de mayo y se ha extendido a otras ciudades de Lituania gracias a su popularidad y éxito.
Fue una gran experiencia poder participar de esta actividad y ver las calles rebosantes de buen ambiente, música, baile y buen clima. Definitivamente el Street Music Day es una de las cosas para ver y disfrutar en Vilna.
Y llegamos al final. Gracias por revisar este listado con algunas de las cosas que ver en Vilna. La capital de Lituania es una ciudad muy interesante, fácil de recorrer y con mucho ambiente.
Mi visita justo cayó el fin de semana de un gran evento musical que coronó un gran viaje a una ciudad de la que sabia muy poco. Espero que con este listado te animes y cuando puedas visites esta parte de Europa.
Ya sabes que recibo las dudas, comentarios, saludos, propuestas y lo que sea en los comentarios, un poco más abajo.
¡Saludos viajeros!
Pato – En Modo Viajero